Plantas recreativas

 

Cuando las plantas sagradas surgieron originalmente de la Creación tenían una finalidad muy maravillosa de elevar la energía y la conciencia.

 

Al principio de su utilización, hace muchísimo tiempo, las plantas que alteraban la conciencia ayudaban a la gente a abrir su percepción a sus cualidades divinas, a su eterno Yo-Dios y al Creador. Se empleaban también para potenciar las facultades telepáticas, así como los dones de clariaudiencia, clarividencia, psicometría y otros usos similares. Estas aperturas espirituales conectaban a las personas de un modo más directo con el reino angélico, los espíritus de la naturaleza, el reino animal y seres del otro lado del telón. Las energías potenciadas que proporcionaba el uso de las plantas sagradas facilitaban también las facultades para el viaje interdimensional. Estas eran las principales finalidades de estas sustancias herbales: crear senderos espirituales. Así es como era el comienzo de la creación antes de la ‘caída de conciencia’.

 

Las plantas sagradas originales ayudaron a la evolución espiritual de la humanidad al comienzo de la vida en este planeta durante millones de años.

 

Durante un periodo muy largo de la evolución de la Tierra la gente recurría de vez en cuando a las energías de estas plantas con mucha reverencia, sacralidad e intencionalidad comiendo un trocito de una hoja; por lo general, directamente de plantas vivas, según la experiencia que se deseara. Existía una variedad de esas plantas, y cada una ofrecía su propio don espiritual específico. En ningún momento se hizo jamás un mal uso de esas plantas ni se generó ninguna adicción por su empleo. Las plantas sagradas poseían  una frecuencia de la quinta dimensión y más allá.

 

Las personas no fumaban para inhalar estas sustancias a través de los pulmones, como se hace con los equivalentes actuales de las plantas originales, los cuales, por cierto, no son en absoluto las mismas plantas. Ellos comían únicamente un trocito de una hoja o una hoja entera, dependiendo de la especie, y esto es todo cuanto se requería para obtener los resultados deseados. La gente se acercaba a las plantas con gran reverencia, pidiendo permiso a los Devas de la planta para compartir los atributos que cada planta concreta poseía. Estas plantas crecían en abundancia en numerosos lugares, y casi cada hogar poseía en su jardín un sitio sagrado reservado para el crecimiento de una pequeña cantidad de unas cuantas especies de estas plantas. Se consideraba que eran alimento para el alma y exactamente igual de importantes como alimento para el cuerpo.

De hecho, las plantas sagradas poseían una vibración muy alta, de modo que, al ingerirlas, los atributos de su vibración elevaban el cuerpo y abrían la conciencia a entendimientos y experiencias superiores.

 

Los seres encarnados que practicaban las artes negras son los que primero alteraron genéticamente las plantas originales.

 

Para comprender lo que sucedió con semejante regalo que la humanidad utilizó durante muchísimo tiempo es necesario retroceder  en la historia hasta el principio de las edades oscuras, cuando las personas entregaron sus poderes  a vibraciones y poderes menores en lugar de a su Yo-Dios. Una a una, las civilizaciones de este planeta fueron olvidando poco a poco su estado original de unidad con lo divino y se abrieron  a las energías manipuladoras y controladoras de la sombra.

 

Los seres encarnados de las artes negras,  que habían adquirido muchos conocimientos en otras esferas de la existencia antes de venir a la Tierra, se convirtieron en los magos negros de los tiempos antiguos. Ellos son los que primero alteraron genéticamente las plantas originales en sus raíces con el fin de ejercer un mayor control sobre la gente debilitando sus poderes y percepción espirituales*. Esto aconteció durante un largo periodo de tiempo, y las plantas originales fueron destruyéndose o alterándose poco a poco hacia vibraciones cada vez menores.

 

Lo que hoy en día hay disponible con el nombre de “plantas recreativas”** posee una vibración alterada negativa, nada que ver con las plantas originales. Aquello a lo que son adictos los jóvenes de este planeta y también muchos adultos son sustancias que introducen a sus consumidores en los niveles inferiores del plano astral, donde quedan enganchados y atados por entidades astrales que necesitan sus energías para sobrevivir, provocando así la  principal causa para las adicciones. Son engendradas de las distorsiones existentes en los cuerpos emocionales de las personas que se permiten el consumo de estas sustancias. Son reales y están vivas como conciencia energética baja, y se vuelven cada vez más agresivas con el tiempo en sus intentos de hacerse con el control de las energías de los consumidores. A fuerza de tiempo y de consumo, las entidades crecen en número y en poder en el campo energético de sus huéspedes.

Las entidades de una conciencia de tan baja vibración tienen tan poca luz y energías propias que ‘tienen que engancharse’ a los humanos ‘que se presten’ para provocar ansias en sus cuerpos emocionales con el fin de sobrevivir. Las ansias son las raíces mismas y fundamentales de las adicciones creadas por entidades del plano astral que necesitan succionar vuestra luz y vuestras energías siempre que puedan, como medio de asegurarse su propia supervivencia. Puede decirse que vuestras adicciones son ‘su chute’. Este concepto de cómo se forman tantos niveles de adicciones no se comprende mucho; y si se hiciese no son muchos los que en vuestra esfera estarían interesados en consumir sustancias adictivas, ni siquiera simples cigarrillos comerciales o alcohol.

 

Con el tiempo, las vibraciones de las plantas que quedaban fueron cada vez más alteradas, hasta que hoy día os quedan pocas opciones. Lo que os queda es un puñado de plantas de baja  vibración que alteran la conciencia. En lugar de llevar a la gente en conciencia a los reinos de Luz en sus viajes multidimensionales, las cualidades negativas de las plantas que tenéis actualmente introducen a sus consumidores en la vibración inferior del plano astral, donde la luz es muy tenue y la conciencia se halla muy distorsionada. Los magos negros alteraron con brillantez las vibraciones de las plantas originales para crear un desgarro del alma y una mayor separación respecto a la Fuente.

 

Las hierbas que se cultivan y las sustancias químicas que se producen hoy en día con fines de alteración de la mente son totalmente innaturales para el alma, el cuerpo físico, la mente y el cuerpo emocional. Estas sustancias crean en dichos cuerpos alteraciones distorsionadas que puede costar muchísimo tiempo corregir, incluso varias vidas en algunos casos.

 

Allí donde había amor, inocencia y pureza de propósito al principio, cuando las plantas sagradas se hallaban en su creación genética original, ahora hay negatividad en forma de una enorme conciencia colectiva de entidades de la droga que son destructivas para el tejido mismo de la vida y para la propia conciencia. Ahora apenas si hay ningún lugar adonde podáis ir que esté libre de la vibración de estas entidades. Se trata de otra conspiración de los hermanos oscuros, cuyo objetivo prioritario es detener o frenar la evolución de toda esta generación.

 

Si pudieseis observar lo que vemos nosotros desde nuestra perspectiva sabríais sin ninguna duda que cualquiera que se permita el consumo de estas sustancias invita a docenas y docenas, incluso legiones, de estas entidades que se pegan a ellos y casi los torturan emocionalmente a que los inciten a tomar más. Son como vampiros hambrientos que compiten por su ‘chute’. La adicción no surge tanto de la planta en sí como de las entidades que se adhieren a quienes ingieren estas sustancias en su cuerpo. Y esta es la principal causa de los tormentos de las adicciones.

 

¿Cómo son estas entidades?

 

Parecen un humo denso y pueden medir seis, diez, doce o veinte pies (más de seis metros) con forma un poco de serpiente. Crecen y se hacen más grandes como una energía que se enrolla alrededor de los distintos cuerpos, el físico, emocional, mental y espiritual, de aquellos que consumen estas sustancias, sea cual sea el modo en que se haga. Es principalmente el cuerpo emocional el que resulta más afectado en tanto que las entidades astrales que personifican esa vibración le imprimen las ansias constantes de consumir cada vez más. Ello conduce la mayoría de las veces a cambios en la personalidad y daños en el carácter. El alma queda cada vez más desconectada de la finalidad de su encarnación y de su ‘auténtico yo’. Aquellos que entran, desde la pantalla de la vida, en los confines de esa conciencia puede que tengan que experimentar varias encarnaciones más con el fin de regresar al estado de conciencia con el que vinieron en esta vida misma.

 

Cuando miréis el campo aúrico de un consumidor de marihuana u otras drogas vais a ver dibujos muy distorsionados del tono rojo de la ira e inmundos tonos verdes que no representan armonía y amor. Hay también un montón de puntos salpicados de color negro y marrón por toda el aura. En más ocasiones que menos, ya no puede verse el hermoso dibujo aúrico geométrico original. Y veríais grupos de entidades casi como una serpiente de humo enrollada que se enrosca*** alrededor de todas y cada una de las partes de su cuerpo. El plexo solar y el corazón quedan  abarrotados de estas entidades y de su energía de baja frecuencia. Así pues, el cuerpo etérico y el campo aúrico de los consumidores de drogas recreativas no resulta algo muy agradable de ver. Si pudiéramos mostrar a los consumidores de drogas su campo aúrico quedarían tan horrorizados que probablemente el 90% o más las abandonarían en el acto.

 

Ahora nuestro ADN está mutando para volver a su cuerpo de Luz original de 12 filamentos y más allá mientras la Tierra se prepara para entrar en su frecuencia de ascensión. Por desgracia, quienes utilizan estas drogas, no están mutando de un modo positivo, pues el empleo de estas está impidiendo su mutación, ya que el principal factor en la mutación celular es la vibración de amor y el esfuerzo que la persona realiza para elevar la vibración. Vuestra cuota de amor y luz mantenida es el factor determinante de la activación natural y automática de vuestro ADN. Ello tiene poco que ver con pagar a alguien para que realice activaciones del ADN que la mayoría de las veces no son sino poco más que ceremonias de intención, a menos que quien las recibe aumente y mantenga la frecuencia del amor y luz, no se consigue mucho.

 

La activación de vuestro cuerpo de luz viene determinada y acelerada por la cantidad de amor y luz que seáis capaces de mantener sobre una base diaria. Ello incluye el amor al Yo, el amor a vuestro cuerpo y el amor por los fines de vuestra  encarnación, y todos los demás tipos de amor también.

 

 

Extractos de las enseñanzas de Adama en Telos, libro 2

 

*lo continúan haciendo tras introducir en nuestra cultura el gran engaño del flúor que consistió en hacernos creer que es bueno para los dientes, cuando en realidad se trata de anular el órgano de percepción de las otras dimensiones del que disponemos: nuestra glándula pineal
**como la marihuana y otras
***aquí tenemos el verdadero significado de la serpiente enrollada alrededor de un utensilio usado para rituales en las religiones y en los grupos capitaneados por la serpiente (la élite oculta)